YHVH Elohai te doy gracias porque tus manos me hicieron
YHVH Elohai te doy gracias porque tus manos me hicieron y me dieron forma. Tú me moldeaste del barro, y sé que al polvo he de volver, pero también sé que tú me otorgaste vida y bondad Jesed, y tu visitación protege mi ruaj.
Te ruego, YHVH, acuérdate de que mi vida es un soplo Ruaj y que mis ojos no volverán a ver el bien tov. Te doy gracias porque tu aliento me hizo y tu neshama Shadday me dio vida. Tú estás con los de Ruaj humilde y quebrantado, para reanimar al de Ruaj humilde y dar vida al de corazón quebrantado.
Reconozco que soy necio e insensato. A veces mi corazón ha sido seducido, pero sé que es una iniquidad negar a Elohim que está en lo alto. No quiero poner mi confianza en el oro, ni en las riquezas.
Por favor, no permitas que me desvíe de tus caminos, ni que endurezcas mi corazón a tu temor. Vuélvete a mí por tu abundante Jesed ve Emet.
AnNa YHVH, te ruego que me hagas conocer tus caminos para que yo te conozca y halle gracia ante tus ojos. Si he hallado gracia ante tus ojos, te ruego, ayúdame porque ya no sé qué más puedo hacer. Te ruego, esté atento ahora tu oído a mi oración. Yo me complazco en temer tu Nombre. Te ruego, hazme tener éxito en este día y concédeme misericordia y gracia delante de tus ojos y delante de todos los hombres, porque tú eres ayuda y escudo para los que temen tu nombre.
Te doy gracias YHVH Elohei del cielo, Elohim Grande poderoso y temible, que guardas el pacto y la bondad a los que te aman y guardan tus mandamientos. Esté ahora atento tu oído y tus ojos abiertos para oír la oración de tu siervo, que hago hoy ante Ti, día y noche, reconociendo mis pecados. Acuérdate de la palabra dada a tu siervo, en la cual espero.
Estoy solo, pobre, afligido, recuerda que tú me hiciste a tu imagen y semejanza, y me diste dominio sobre la creación. Me diste la bendición de ser fructífero, para crecer y aumentar, para llenar la tierra y dominarla. Me formaste y me diste mi neshama.
Estoy solo, pobre, afligido, una profunda vulnerabilidad me embarga, sintiendo la fragilidad de la vida como un soplo (Ruakj), donde el bienestar y lo bueno se percibe inalcanzable. La pobreza y la aflicción me hacen sentir insignificante, pero el recuerdo de haber sido formado del barro trae humildad y conexión terrenal como un consuelo.
Recuerdo que tú me hiciste a tu imagen y semejanza, una impronta divina que persiste a pesar de mi sufrimiento actual, otorgándome un valor inherente y una conexión especial con lo sagrado ('aSeh 'aDam betzalMenu kidmuTenu), una dignidad inalienable que me recuerda mi valor intrínseco.
Me diste dominio sobre la creación, un poder que contrasta con mi aflicción, pero que persiste como recordatorio de mi propósito original, el señorío sobre los peces del mar, las aves del cielo, el ganado y toda la tierra.
Me diste la bendición de ser fructífero, una promesa de crecimiento y abundancia (Peru urevu) que contrasta con mi sensación de carencia, una esperanza para superar mis circunstancias. Me formaste y me diste mi neshama, el don fundamental de la vida que me conecta directamente con lo divino (Nishmat jaiYim), una fuerza para sobrellevar mi aflicción, el aliento de vida (Ruach) que me hizo un ser viviente (leNefesh jaiYah), la neshama (Shadday) que me otorgó vida; tus manos me formaron y me dieron forma, confirmando un propósito y valor inherente.
Si he hallado gracia ante tus ojos, haz que yo pueda regresar en Shalom, ayúdame a andar en tus caminos con humildad y temor y concédeme riqueza honor y vida. Si tú no te complaces en mí, mira aquí estoy; haz conmigo lo que te parezca bueno ante tus ojos.
Te ruego, si he hallado gracia ante tus ojos, dame señal de que eres Tú mismo quien hablas conmigo. Porque sé que si tú estás conmigo, seré capaz de superar cualquier obstáculo, sin importar cuán grande sea.
Baruj YHVH, porque tú no contenderás para siempre, ni perpetuamente estarás airado, porque delante de ti sucumbiría el ruaj y la Neshama que tú has hecho.